"Nuevas sensaciones"
"Me despierto en un hotel de Barcelona. Como no, esta dieta mediterránea no es como la dieta finesa por lo tanto he de ir al baño urgentemente. Hoy tengo ganas de trabajar (no soy como esos latinos vagos). Además estoy volviendo a pillar la rutina del trabajo. Ayer salí de fiesta porque ya sabéis que yo ante todo soy un profesional

Entro en el box y veo la silueta de mi coche debajo de un manto gris. Me lo destapan entre aplausos y…¡¡¡POR DIOS!!! Me han cambiado a mi flecha de plata. Es el tipo de coche que llevaría alguien sin estilo y sin belleza, es decir un ser antagónico a mi. Los cuernos que tiene el coche ya no dan ese aspecto de estilo ingles mezclado con maquinaria alemana que daba “Mi Flechita”. Ya no podré ver el brillo de mis hermosos ojos azules reflejados en esa carrocería de color plata. Es un día triste. El único aspecto bueno que le veo es que hace juego con mi cabello color heno. Un coche como la persona debe tener belleza interior y exterior (en la interior no estamos hablando de un buen miembro viril ¡¡¡MARRANOS!!!) y a este coche le falta exterior. Esperemos que por lo menos haya interior y podamos decir el tópico de: es que lo que importa es la belleza interna. Pero la verdad no necesito un buen motor para ganar y Mclaren lo sabe.

Tras el primer contacto con el coche. Penetro mi cuerpo en el y me dispongo a salir, mmm huelo la expectación, ya puedo oir a esas fans rompiendo sus gargantas por mi… De lo malo el coche tiene ese olor envolvente a nuevo, pena que no haya espacio para colgarle un ambientador de pino finés. El motor también parece nuevo; ya no ruge como antes, no desprende esa fiereza plateada, es que realmente suena a ¡mandarina! este sonido no es el sonido de un formula 1, si no de un monovolumen para la familia, yo quiero un coche potente, no un coche tranquilo y seguro en el que poder llevar a mi cerdo.
Hoy vamos a dar pocas vueltas porque nos gusta ser discretos para después darles el hachazo a los contrarios. Bwahahahaha la táctica siempre ha sido nuestro fuerte. Yo apenas atiendo a la conducción porque sigo intentando ver el reflejo de mis ojos azules en la carrocería pero no hay manera. Parece que los cabalinos rampantes van bien. La verdad es que también me he puesto a reflexionar sobre si el posible cambio a Ferrari le vendrá bien a mi "look" pero no encuentro combinación en mi profundo armario ropero (los metro sexuales tenemos mucha ropa) con ese rojo. Además esa mezcla de rojo y el color de mi pelo me recuerda a la bandera del país de alguien bajito y sin estilo, por otro lado mis ojos resaltarían todavía más si cabe. Mejor tiempo de Massa (os vuelvo a decir que no es un ser enorme y verde) y Alonso

Hombre ahí esta Coulthard, habrá que retomar donde lo dejamos…, tablas creo. La partida de rigor transcurre tranquilamente, no diré el perdedor por no desprestigiarle, solo decir que fue ajustado. También sale mi compañero Pedro. El otro día se le rompió el motor (no si aparte del horrible color romperá con un poco de conducción competitiva) pero esta vez no. El también como hombre discreto que es pasa desapercibido.
Vuelvo al box. Las nuevas sensaciones me dejan indiferente (que extraño con mi mas que conocida frialdad), en las noticias dirán que he roto el motor y he atropellado a un mecánico, nunca me gusto la propaganda demagógica, en fin…"